Esta tarta de yogur es mucho más que un simple postre: es una explosión de sabores en cada bocado. Ligera, esponjosa y perfectamente húmeda, esta delicia está endulzada naturalmente con miel de maple o miel de abeja, aportando un toque de dulzura natural que se combina maravillosamente con la frescura del yogur.
Desde que la probé por primera vez hace unos meses, he estado completamente obsesionada con esta receta. Me encanta su simplicidad; no necesita ingredientes sofisticados ni pasos complicados. Además, su sabor fresco la convierte en el complemento perfecto para cualquier momento del día. Ya sea que la disfrutes con una taza de café caliente por la mañana o con una refrescante taza de té helado en una tarde calurosa, te aseguro que te va a encantar. No solo es deliciosa, también es una opción saludable, rico en proteínas que la convierte en un postre proteico y bajo en calorías. Es una excelente opción para aquellos que tienen necesidades dietéticas específicas.
Lo que más me encanta de esta tarta de yogur
- Fácil de preparar: Esta receta requiere solo 6 ingredientes y toma aproximadamente 10 minutos de tiempo de preparación para la mezcla.
- Apto para personas que sufren de alergias: Este pastel es sin gluten, sin granos, sin lácteos y endulzado de forma natural, lo que lo convierte en una excelente opción para aquellos que tienen necesidades dietéticas específicas.
- Es bastante liviano: la maicena le da un toque ligero y suave. Es una delicia para el paladar.
¿Qué de especial tiene el yogur griego?
El yogur griego es conocido por ser una excelente fuente de proteínas, lo que lo convierte en una opción ideal para aquellos que desean aumentar su ingesta de proteínas. Las proteínas son un macronutriente primordial que nuestro cuerpo necesita para construir y reparar tejidos, producir enzimas y hormonas, fortalecer el sistema inmunológico, proporcionar energía y transportar moléculas. También nos ayuda a mantener una sensación de saciedad y apoya con la pérdida de peso.
Además, el yogur griego tiene una textura cremosa y espesa a diferencia del yogur regular, lo que lo convierte en un ingrediente versátil, ya que se puede disfrutar solo, con frutas o como ingrediente en una variedad de recetas.
Ingredientes que necesitamos
Esta tarta de yogur es fácil y rápida de preparar. Solo necesitaremos 6 ingredientes y lo más provable es que ya tengas todos en casa. Aquí te dejo los ingredientes:
- Frambuesas: 1 taza de frambuesas- las frambuesas son ricas en antioxidantes, que ayudan a combatir el daño celular. Además, son una excelente fuente de fibra, lo que mejora la digestión.
- Huevos: 3 huevos, esta receta no lleva harina, por lo que los huevos ayudarán a que tu tarta crezca y tenga esa textura esponjosa y suave.
- Extracto de vainilla: 1 cucharadita de extracto de vainilla para darle un sabor especial.
- Yogur griego: 1 taza 1/2 de yogur griego.
- Maicena: 1/3 de taza de maicena.
- Chispas de chocolate blanco: (opcional) chispas de chocolate blanco sin azúcar. Mi marca favorita es Lily’s white Chocolate baking chips.
Variaciones de ingredientes
Yogur libre de lácteos: Puedes usar un yogur libre de lácteos o uno bajo en grasa si así lo prefieres.
Frutas alternativas: usa las frutas que más te gusten. Puedes cambiar las frambuesas por fresas, arándanos, moras o la que sea de tu preferencia. Lo importante es que sea apetitoso para ti.
Coco rallado sin azúcar: Ofrece una alternativa diferente pero sabrosa y con menos carbohidratos.
Preparación de la tarta de yogur
Paso 1: Precalienta tu horno a 180°C o 350 F.
Paso 2: En un tazón grande, mezcla el yogur griego, los huevos y la vainilla hasta que estén bien combinados.
Paso 3: Agrega la maicena (o el sustituto que elijas) y mezcla hasta que no queden grumos.
Paso 4: Incorpora suavemente las frambuesas y las chispas de chocolate blanco a la mezcla.
Paso 5: Vierte la mezcla en un molde para tarta previamente engrasado y enharinado.
Paso 6: Hornea en el horno precalentado durante aproximadamente 35-40 minutos, o hasta que el centro esté firme y la parte superior esté dorada.
Paso 7: Una vez que esté lista, deja enfriar la tarta en el molde durante unos minutos antes de transferirla a una rejilla para que se enfríe por completo.
Sirve la tarta de yogur a temperatura ambiente o refrigerada, ¡y a disfrutar!
Recuerda que el tiempo de cocción puede variar según tu horno, así que es recomendable hacer la prueba del palillo: inserta un palillo en el centro de la tarta, y si sale limpio, la tarta está lista.
¿Cómo alamacenar la tarta de yogur?
- En la refrigeradora: Guarda lo que quede en un recipiente hermético en el refrigerador por hasta una semana.
Ahí lo tienes, una tarta de yogur que no solo te deleitará con su frescura y sabor delicioso, sino que también se convertirá rápidamente en uno de tus postres favoritos. Tan fresca y deliciosa, esta opción práctica, saludable y baja en calorías se adaptará perfectamente a tu estilo de vida ocupado. Su simplicidad en la preparación la convierte en una elección ideal para cualquier ocasión.
¡Disfruta cada bocado y deja que esta tarta de yogur se convierta en un clásico en tu repertorio de postres!
Y lo mejor de todo, puedes personalizar esta delicia según tus gustos y preferencias. Agrega tus frutas favoritas, experimenta con diferentes endulzantes naturales. Con esta receta, las posibilidades son infinitas. ¡A disfrutar!
